Miguel Aguado cuenta con una formación centrada en la comunicación empresarial, institucional y de RR.PP con un master por The George Whashington University, así como en campañas políticas por esta misma Universidad y un master en Marketing y Telecomunicaciones por INSEAD. Es divulgador  ambiental en diferentes televisiones, radios y otros medios, y consultor en comunicación, RSC, sostenibilidad y energía. Además de profesor en diferentes entidades como la Universidad Europea e ISEMCO también en estas materias. En la actualidad, y desde 2010, es además socio director de B Leaf, consultoría de comunicación y sostenibilidad.

Usted arranca esta VI edición del Congreso de Tecnologías Emergentes con la ponencia inaugural “Transformación Tecnológica y Sostenibilidad”, ¿Cuáles son las ideas qué quiere transmitir en este importante momento del congreso en el que se centrarán todas las miradas?

A veces pensamos que el uso de las tecnologías son un perjuicio para el planeta por los altos consumos de materias primas, energía, agua y la generación de residuos. En parte es cierto, pero también nos permiten conocer los impactos, al propio planeta y su biodiversidad, aprender y, muy especialmente, innovar y consumir de forma más sostenible los recursos, menos energía y generar esta de forma limpia, reaprovechar los residuos para transformarlos en nuevos recursos y un largo etcétera. En definitiva las tecnologías suponen ya grandes apoyos para la lucha contra el cambio climático, y al tiempo son grandes oportunidades de desarrollo. Mi mensaje es en positivo, sin lugar a dudas.

¿Qué implicación tiene la transformación tecnológica en la sostenibilidad y la sostenibilidad en la transformación tecnológica?

Mucha o muchísima, hay que pensar que la transformación tecnológica ligada no solo a la digitalización, sino también a nuevos diseños y tecnologías está permitiendo seguir avanzando de forma más sostenible y menos perjudicial para el planeta. Y también, porque la búsqueda de modelos y sistemas más sostenibles impulsa a la tecnología y la hace más eficiente, demandada, genera mercado y posibilita muchas oportunidades.

¿Cuáles son los principales retos que tenemos en los próximos años en materia de sostenibilidad?

El primero, por urgente, es el de revertir los efectos que sean posibles del cambio climático. Lo estamos notando ya, y mucho, por eso debemos aprender a adaptarnos a los ya existentes. Por otra parte debemos producir energía de forma más eficiente y limpia. Los residuos y la contaminación que generamos, cuando no son tratados de forma correcta, son un gran problema incluso para la salud humana. Nuestro principal reto es el de seguir evolucionando, reduciendo nuestro impacto y aprovechando las oportunidades que la propia sostenibilidad nos ofrece.

Europa ha liderado el cambio de mentalidad y se plantea los grandes retos del año 2050, pero sin embargo es uno de los continentes más pequeños ¿Qué medidas o cómo hacer que el resto de continentes se suban a esta ola? 

Europa siempre ha tenido una capacidad de creación de modelos y de ejemplo para el resto del planeta. Por ello, si nos va bien con nuestro modelo y los retos de cara a 2050 seguro que seremos un motor de arrastre para el resto. Pero también podemos, debemos, y ya lo estamos haciendo, utilizar nuestra capacidad como mercado para obligar a otros países a producir de forma más eficiente si quieren entrar en nuestros mercados.

¿Qué labores llevan a cabo desde B Leaf y cómo aportan valor en el mundo de la sostenibilidad?

Cuando creamos nuestra empresa hace ya 12 años quisimos juntar dos líneas, una más técnica en materia de sostenibilidad para ayudar a las empresas e instituciones a incorporar criterios ciertos, honestos y bien realizados de sostenibilidad en todo su funcionamiento y, por otra parte, ayudarles a contar, a comunicar lo que hacen en estos temas a sus equipos, mercados o la sociedad en general. Usamos un lema que creemos lo define bien: Creer, saber hacer y hacer saber. Estamos muy especializados, somos una consultora mediana y nos integramos bien en los equipos de nuestros clientes. Nos gusta lo que hacemos, y se nota.

¿Qué supone que un congreso como el de tecnologías emergentes aborde de una manera tan directa la cuestión de la huella tecnológica y que esta sea ecológica? 

Imprescindible a todas luces y una buena percepción de que este congreso sabe marcar las prioridades y las demandas sociales, empresariales e institucionales. Este congreso es una gran oportunidad de aprender unos de otros, debatir y dialogar y hacerlo con una visión más ecológica es fundamental.